No es fácil aplicar a una oferta laboral si no sabes cómo hacer un currículum vitae. La mayor duda es si está bien hecho y si, por tanto, van a llamarte luego de que lo lean. Por eso aquí vamos a explicarte la mejor manera de hacer un buen currículum vitae para que destaque de entre todos los demás.
¿Qué encontrarás aquí?
Consejos para hacer un currículum vitae
Hay 2 requisitos fundamentales que necesitas aprender sobre cómo elaborar un currículum vitae y estos son, en primer lugar, saber captar la atención del reclutador desde el principio y, luego, saber cómo no perder esa atención de modo que se mantenga motivado para solicitarte una entrevista.
Por tanto, es vital que para cumplir con estos requisitos te apegues a ciertas pautas o reglas cuando hagas tu currículum.
Empecemos con lo que debe ir en un currículum vitae. Lo primero es tu información personal. Esto lo sabe la mayoría, pero lo que no es muy conocido entre los postulantes es que desde el primer momento de abrir un currículum y leerlo, el reclutador sentirá más o menos agrado en función de lo que vea.
No queremos decirte con esto que los reclutadores están para evaluar el diseño o la creatividad de tu currículum, o puede que sí. Realmente lo harán de manera inconsciente, pues algunos formatos resultan más agradables que otros, y de eso puedes aprovechar un poco para despertar la atención de quien vaya a leer tu currículum.
¿Cuál fuente usar para un currículum vitae?
Lo mejor es optar siempre por lo sencillo. Para ser más claros, es seguro que no puedes utilizar cualquier tipo de fuente, ni una muy informal ni una que haga monótono el texto. Puedes emplear negritas, cursivas y tamaños distintos. Los detalles cuentan y a veces menos es más; solo mantén el equilibrio entre muy poco y demasiado.
Prueba con estas fuentes, ya sea combinándolas o usando una sola:
- Arial
- Georgia
- Garamond
- Calibri
- Cambria
- Helvética
- Didot
La fotografía para un currículum
Ahora hablemos sobre la fotografía en un currículum.
Si bien es cierto que los prejuicios sobre la apariencia quitan la objetividad a un reclutador, debes recordar que es humano y difícilmente no tendrá ni un prejuicio cuando vea tu fotografía. Pero aplicando algunas cosas sencillas puedes hacer que esos prejuicios se conviertan en una ventaja; en lugar de que sean negativos, serán más bien positivos.
- Toma tu foto varias veces No te aferres a la primera fotografía que te tomes o te tomen, puedes tomar varias y, sobre todo, retocarla para verte incluso mejor. Un error sería no tomarte ninguna y usar una que hayas tomado hace mucho. Pon una reciente.
- Llama la atención con un ángulo diferente No siempre llamar la atención requiere de algo inquietante o impresionante, con sutileza puedes hacerlo tomándote una foto en la que salgas con el torso ligeramente de lado (hacia tu derecha) y el cuello relajado con tu mirada viendo al frente.
- Usa un fondo apropiado Te conviene que el fondo de tu foto no destaque más que tú, sino que este te haga resaltar más. Pon algo que compagine con el color de tu piel, cabello y ropa. Puedes probar desenfocándolo o eliminarlo y añadir un degradado de tonalidad oscura. Eso mantendrá lo llamativo sin sobrepasarse.
Los datos personales en el currículum vitae
Una vez que tengas una buena fotografía y hayas escogido la fuente que usarás, no te olvides de agregar cada uno de estos datos:
- Nombre completo.
- Edad y/o fecha de nacimiento.
- Lugar de nacimiento.
- Número de D.N.I.
- Dirección.
- Teléfono.
- Correo electrónico.
¿Cómo agregar la formación profesional a un currículum?
Hasta este punto has cumplido con lo primero, la de despertar la atención del reclutador, pero falta la segunda parte, que es fundamental para que esa atención no se pierda. Y esta es muy importante porque de ella dependerá en gran medida que te llamen para la entrevista o no.
Esta segunda parte se trata de tu formación académica/profesional y, más importante aún, tu experiencia laboral. Cualquier reclutador considerará como determinantes estos apartados en tu currículum vitae, sobre todo tu experiencia laboral. Y como reglas básicas hay tres:
- Sé claro y conciso con la información.
Al hacer tu currículum ten en mente que quien lo leerá espera tener la información disponible de tal modo que no deba esforzarse mucho para buscarla, ya que seguramente tendrá más de uno que leer. Por eso es importante seguir un orden, y para ello tienes más abajo algunos ejemplos de cómo acomodar la información en un currículum.
- Debes poner lo que requiere la empresa para el puesto al que aplicas
Esta otra regla está muy relacionada con la anterior, pues además de que la información que añadas debe ser clara y concisa, también debe ser relevante para la empresa.
Lograr este objetivo es relativamente sencillo, solo necesitas basarte en lo que solicitan en la oferta de trabajo. Así el reclutador encontrará lo que busca en tu currículum. Ya que irá escaneándolo y se detendrá en lo que llame su atención.
¿Eres un ingeniero informático y están buscando a un programador? Pues esa información es más relevante para el reclutador que tus estudios de secundaria o preparatoria.
- Entre más actualizado y valioso, mejor
Siguiendo la misma línea, tus últimos estudios son más relevantes que los más antiguos, así que te conviene destacar estos. Si tienes una capacitación que cumple con las últimas expectativas del mercado, eso debe destacar en tu currículum. En cambio, deja de lado las capacitaciones que hoy en día no tienen valor o simplemente no aplican para la oferta.
La experiencia laboral en el currículum vitae
Este apartado del currículum vitae es el más importante, ya que la experiencia laboral le dice mucho al reclutador, incluso más de lo que dicen tus estudios. Por ello, una recomendación es que te bases siempre en lo que solicita la oferta laboral.
No siempre esperes que un reclutador abra tu currículum, pues antes de un humano puede haber un software que filtre ciertas palabras clave de entre todos los currículums para que luego el reclutador proceda a leer con más criterio.
¿Qué hacer si no tienes experiencia laboral?
En este caso debes ser honesto, pero no por ello dejar de llenar este apartado o poner que no tienes experiencia. Es totalmente válido añadir experiencias relacionadas al puesto de trabajo. Si has egresado de la universidad y buscas conseguir tu primer empleo, pon tu experiencia en la práctica profesional.
También puedes destacar tus conocimientos en las funciones que el puesto requiere, por ejemplo, añade que sabes manejar paquetes de ofimática o que posees habilidades de liderazgo. Sin olvidarte de ser honesto.
Tipos y ejemplos de currículum vitae
Aquí tienes algunos ejemplos de los apartados de experiencia laboral de currículum vitae para que sepas cómo organizarlo mejor de acuerdo a tu necesidad.
Currículum cronológico
Para hacer un currículum vitae en orden cronológico puedes empezar desde tu empleo más reciente o desde el más antiguo, siempre siguiendo el orden.
Ejemplo:
2018 (4 meses) Vendedor en farmacia X
2018 (5 meses) Atención al cliente en farmacia X
Este tipo de currículum es más eficaz cuando no has tenido empleo previamente, tus contrataciones han sido cortas o simplemente te han cambiado de puesto en la misma empresa.
Currículum funcional
En este tipo de currículum destacan las funciones que has desempeñado en tus anteriores empleos. Pon ejemplos de lo que has conseguido cuando estuviste a cargo de ciertos proyectos, objetivos o tareas.
Ejemplo:
2017-2019 Contrato en el departamento de informática en la empresa X
- Desarrollo de programa para gestionar la logística de toda la empresa.
- Desarrollo de software para coordinar las finanzas en todos los departamentos.
Te recomendamos usar este tipo de currículum si has tenido varios empleos que coinciden con lo requerido en la oferta.
Como recomendación final sobre cómo hacer un currículum vitae, procura que este no tenga más de dos páginas. Siguiendo todas estas recomendaciones te darás cuenta de que puedes llegar a tener más de un currículum, dependiendo de a cuantas ofertas apliques.